Según el Reporte Brundtland el desarrollo sostenible se define como "aquel desarrollo que satisface las necesidades de las presentes generaciones sin comprometer la habilidad de las futuras para satisfacer sus propias necesidades", la construcción sostenible procura tener un control de erosión de sedimentación, hacer un efectivo manejo de la escorrentía, tener un efectivo Manejo de Residuos Sólidos, y tener un manejo sostenible de materiales y equipos.
La industria de la construcción es responsable de aproximadamente 40% de Residuos Sólidos que se disponen actualmente en un botadero o un relleno sanitario, en muchos casos al no poder manejarse de esta manera se procede a incinerar los Residuos Sólidos, que en muchos casos manejados adecuadamente podrían ser reusados y utilizados en otro proyecto.
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